El año pasado fue difícil para el sector, con una caída del 50% en los valores bursátiles y una disminución del 70% en la financiación de capital riesgo para las startups fintech. Sin embargo, empresas como DataSnipper y las empresas de seguros cibernéticos Coalition y At-Bay han encontrado formas de prosperar en este entorno. Leer más...Dos categorías en retroceso en la lista son el sector inmobiliario y Blockchain y Crypto debido a los altos tipos de interés y al cambio de enfoque hacia empresas que pueden navegar a través de una era de mayor escrutinio regulatorio. En 2024, la lista Fintech 50 no clasifica las fintech más valiosas, sino que añade información sobre cuándo una empresa recaudó fondos por última vez. Empresas como Wealthfront y Zest AI, que formaron parte de la primera lista Fintech 50 en 2015, han vuelto a aparecer este año. Algunos de los recién llegados a la lista, como Carry1st y Pulley, destacan por los nichos únicos que han encontrado y por irrumpir con fuerza en segmentos que ya contaban con líderes establecidos. Pulley, por ejemplo, ha crecido un 109% desde principios de 2023 y ha suplantado a Carta en la clasificación. La pandemia ha demostrado la viabilidad de formas remotas de trabajo y estudio. En 2024, se esperan avances significativos en el campo de la salud, mejorando tratamientos y equipamiento para la telemedicina. Asimismo, la educación experimentará cambios, con un aumento en el contenido interactivo y elementos electrónicos, brindando flexibilidad a los estudiantes.
El desarrollo de robots se ha convertido en una prioridad, con empresas como Boston Dynamics liderando la creación de productos avanzados. La inteligencia artificial desempeñará un papel crucial en esta evolución, permitiendo la creación de robots cada vez más capaces y eficientes.
El 5G, una tecnología de telecomunicaciones que ha ido democratizándose, se espera que alcance un nivel de estandarización más alto en 2024. Se anticipa una mejora en la calidad de la señal, junto con el abandono progresivo de redes más antiguas, como el 3G.
En respuesta a la creciente preocupación por el medio ambiente, se espera que las empresas tecnológicas intensifiquen sus esfuerzos para hacer sus operaciones más eficientes en términos de energía. La transición hacia energías renovables y la reducción de la huella de carbono serán prioridades. Este compromiso se ha observado en la industria automotriz, con la planificación del abandono gradual de los combustibles fósiles.
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